Este disco lo escuché como mantra desde el mismo día que salió hasta siempre.
Mantra sounds de fines del 95 / verano de 1996 donde me iba solo a la quinta que mi madre tenía en Gral. Rodríguez a pintar o a barnizar el quincho. Solo. Naturaleza. Y entre otras joyas como Leonard Cohen que también lo había descubierto en ésas épocas, era uno con sonido y el ambiente natural que me rodeaba.En el campo me sentía en paz. A veces tocaba la guitarra, a veces invitaba amigos, a veces hacíamos bacanal con asado y vino, a veces nos metíamos a la pile. Había mucho que mantener allí, y a mi me copaba todo eso. Cuidar los ligustros, cortar el pasto, hacer mejoras en la casa, ayudar en lo que sea.
Fueron momentos místicos, también reinventarme, de crecer porque tenía recién veinti, y como siempre los desafíos de la vida apretaban.
Este disco, la música de Lisa Gerrard fueron fundamentales en mi devenir como hombre desde ese teen que se resistía a morir.
Siempre medité en silencio, escuchando la música chill out o ambient que me gustaba. Los pensamientos fluían claramente, la ira siempre se disipaba, tranquilandia llegaba rápidamente con sonidos que estaban diseñados para fluir uno con el universo.
Lisa Gerrard: cantante australiana de Dead Can Dance |
Y por aquí my Best Of Lisa Gerrard que raja la tierra of course.
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