Claro, nunca antes les comente que era fana de Lenny...then...*Where are we running???*
Mientras tanto les cuento una pequeña anécdota (entre miles que registro en mi HDD) en plan Sursonique, es más, es vieja.
Hubo una vez que conocí a una chica de Ituzaingó, lejos, si, pero vivía la muy petisa en un dpto. con una amiga mágica que se llamaba Fedra, en el centro porteño, y bien, con un amigote de partuza, las visitabamos seguido antes de ir a Margarita de Cabildo, los sábados. Si, eran épocas donde aún teníamos en la cabeza a Guns N´ Roses, pero había un perfume sexual siempre entre los cuatro que éramos, a pesar del dolor de oídos.
Nunca más la volví a ver.
1991Oct.
Ese mismo año, at summer...Hubo una vez que conocí a una rubia super pechocha, hermosa y tigresa la muy guacha, era de Haedo, en las faldas de Cordoba, bebíamos cerveza y comiamos maní en un castillo muy art decó que luego usurparon con poder político la gente de la UOM, hermosissimo, imponente, enfrente el paisaje lleno de víboras, matorrales y si, peperina. Nos sacabamos fotos como si no fuéramos argentinos, por los arroyos, mojándonos los levis ajados. Se llamaba Mariana y fuimos amantes varios años más. Desde el 96 que no la veo más, aún no se por qué razón.
Ese mismo año, at winter...Me encuentro por última vez con la rubia de Haedo, siempre super sexual, siempre agarrandonos en calles oscuras y hoteles de Caballito, pero bien, aquella vez me pidió que la pase a buscar por la Facultad de Morón, así que junte coraje, agarré el MinoTaunus, y la esperé un rato en la cafetería, típica de universidad.
Luego de media hora, la veo venir, con una amiguita bastante buena, como de muy lejos no veo bien, espero a que llegue, me reconoce, pero yo miraba atónito con quien estaba del brazo...
Claro, era la petisa que andaba conmigo, la de Ituzaingó, eran cumpas de facu, no hubo esa noche menage si se lo preguntan, pero me sorprendí de lo chico carajos que chico que es el mundo!
Me quedé con la rubia, claro, como todo el clisé peliculero americano de los 80´s...
Y como anoche tenía insomnio y me levanté a las 12, pensando en cómo resolver un maldito video 3D que me dió un cliente, al no poder dormir, entre tantas cosas, se me vino ese recuerdo, casual, mientras decidía qué carajos hacer pues hoy mismo tengo que entregar eso para que paguen my job.
Obvio que ya lo terminé.
El mundo es chico, es grande, es alto, y lo más bajo también circula entre nosotros, con nosotros, pero nunca jamás me deja de sorprender cómo suceden las cosas.
Agradezco todos los días estar vivo, tener mi cuerpo intacto, a pesar de haber buscado con frenesí la muerte todos estos años.
Sin importarme nada.
Pero aquí estoy, contándoles.
Mientras tanto les cuento una pequeña anécdota (entre miles que registro en mi HDD) en plan Sursonique, es más, es vieja.
Hubo una vez que conocí a una chica de Ituzaingó, lejos, si, pero vivía la muy petisa en un dpto. con una amiga mágica que se llamaba Fedra, en el centro porteño, y bien, con un amigote de partuza, las visitabamos seguido antes de ir a Margarita de Cabildo, los sábados. Si, eran épocas donde aún teníamos en la cabeza a Guns N´ Roses, pero había un perfume sexual siempre entre los cuatro que éramos, a pesar del dolor de oídos.
Nunca más la volví a ver.
1991Oct.
Ese mismo año, at summer...Hubo una vez que conocí a una rubia super pechocha, hermosa y tigresa la muy guacha, era de Haedo, en las faldas de Cordoba, bebíamos cerveza y comiamos maní en un castillo muy art decó que luego usurparon con poder político la gente de la UOM, hermosissimo, imponente, enfrente el paisaje lleno de víboras, matorrales y si, peperina. Nos sacabamos fotos como si no fuéramos argentinos, por los arroyos, mojándonos los levis ajados. Se llamaba Mariana y fuimos amantes varios años más. Desde el 96 que no la veo más, aún no se por qué razón.
Ese mismo año, at winter...Me encuentro por última vez con la rubia de Haedo, siempre super sexual, siempre agarrandonos en calles oscuras y hoteles de Caballito, pero bien, aquella vez me pidió que la pase a buscar por la Facultad de Morón, así que junte coraje, agarré el MinoTaunus, y la esperé un rato en la cafetería, típica de universidad.
Luego de media hora, la veo venir, con una amiguita bastante buena, como de muy lejos no veo bien, espero a que llegue, me reconoce, pero yo miraba atónito con quien estaba del brazo...
Claro, era la petisa que andaba conmigo, la de Ituzaingó, eran cumpas de facu, no hubo esa noche menage si se lo preguntan, pero me sorprendí de lo chico carajos que chico que es el mundo!
Me quedé con la rubia, claro, como todo el clisé peliculero americano de los 80´s...
Y como anoche tenía insomnio y me levanté a las 12, pensando en cómo resolver un maldito video 3D que me dió un cliente, al no poder dormir, entre tantas cosas, se me vino ese recuerdo, casual, mientras decidía qué carajos hacer pues hoy mismo tengo que entregar eso para que paguen my job.
Obvio que ya lo terminé.
El mundo es chico, es grande, es alto, y lo más bajo también circula entre nosotros, con nosotros, pero nunca jamás me deja de sorprender cómo suceden las cosas.
Agradezco todos los días estar vivo, tener mi cuerpo intacto, a pesar de haber buscado con frenesí la muerte todos estos años.
Sin importarme nada.
Pero aquí estoy, contándoles.
