Las Toninas es central en este extraordinario documental sobre la basura en el Partido de la Costa.
Comencé a parar en esa zona costera de la Provincia de Buenos Aires en 1992, precisamente San Bernardo. También Mar de Ajó.
Ya en esa época se veía basura en muchos lados cerca de la playa.
Los que fumábamos no le dábamos mucha pelota al tema de las colillas del cigarrillo que hundíamos en la arena.
Fuí a vacacionar con mi anterior familia al Partido de la Costa hasta 2009, unos 17 años. No es poco. Ibamos en temporada alta y en baja, en cualquier momento del año. Siempre trataba de buscar lugares alejados donde los chicos pudieran disfrutar de la libertad de la playa y estar en la naturaleza. Alejados de la mugre de la ciudad.
Hoy sería imposible de conseguir un lugar prístino no contaminado así en las costas bonaerenses...
Entre 1994/95 ya con 20/21 años, que fue cuando comencé a militar en #Greenpeace tomé conciencia absoluta sobre los desperdicios humanos que contaminan el planeta.
Durante la década pasada, al volcarse muchíssimas familias al turismo ese impacto se notó mucho en la naturaleza.
Tachos de basura colapsados en todos los balnearios. Baldíos llenos de basura por doquier cerquita de la costa.
Las playas llenas de desperdicios.
...
En años recientes me mudé de lugar para descansar en verano, evitando todo lo posible la temporada alta allí donde fuera. Estar rodeado de gente cuando quiero descansar definitivamente no es lo mío.
Resulta que en parajes mucho más lindos y desiertos fuera del Partido de la Costa como: Mar Chiquita, Mar de Cobo, Mar Azul, Las Gaviotas, Mar de las Pampas al sur de Villa Gesell, todo todo plagado de desperdicios plásticos y marine debris (ghost nets, etcras) productos de la pesca embarcada.
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| Mi huella al lado de marine debris de la pesca |
En busca de paraísos no tocados por el hombre llegué al sur de Mar Azul donde está el faro Querandí. Preciosísimo lugar donde casi no hay basura ni rastros de humanidad excepto el faro. Quizás sean los vientos y las mareas que lo impiden, quizá el denso bosque de pinos plantados por el hombre durante el siglo pasado que hace de barrera entre la ruta y el mar.
Exceptuando esta línea costera casi llegando a la albufera de Mar Chiquita, todos los paraísos que descubrí están llenos de desperdicios plásticos. Lugares donde NO HABÍA NADIE HASTA DONDE ME LLEGABA LA VISTA estaban llenos de basura creada por el hombre.
Esta basura estará allí cuando los hijos de mis nietos vayan a la playa por primera vez como cuando mi madre y mi padre me llevaron por primera vez a Las Toninas en 1977.
Volviendo al tema central que inspiró este post: Buscando a las Toninas es un docu que deberían pasar en todas las escuelas y todos los padres verlo junto a sus hijos para tomar conciencia del colapso ambiental que estamos viviendo y que lamentablemente le estamos dejando a las futuras generaciones. Todo por comodidad. Todo por existir dentro de los parámetros de consumo capitalistas. Un horror el resultado.
Aquí el documental completo:
Y por aquí una nota que grafica bastante bien el daño ambiental irreversible que atraviesan los océanos y ecosistemas marinos.
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